jueves, mayo 11, 2006

Deducciones a las dos de la madrugada

El Buda, básicamente, nos enseñó que el motivo de todo sufrimiento humano es bien simple y nada complicado de discernir: El deseo truncado. Nosotros como seres humanos deseamos, deseamos poseer, deseamos dominar, deseamos disfrutar... quizás sea por adaptación al medio, por evolución (probablemente, pues quien no desea se queda seco ahí parado y no se dedica a procrearse, como todo buen ser vivo debe) o por ¡Vete tu a saber qué! En el fondo no es lo importante. Lo principal es que deseamos y punto. Cuando satisfacemos ese deseo vivimos una descarga de placer, quién sabe si química (como el placer sexual), mental (es decir, eléctrica al fin y al cabo) o, para quien considere oportuno, espiritual: Nuestra alma se regocija. Pero, amigos, el mundo no es un corral de virtudes y el placer no es hegemónico, porque al fin y al cabo, si no hubiera sufrimiento para contrarrestar al placer o al disfrute, éste segundo no nos serviría para más bien poco. Y si nos ponemos tiquismiquis podríamos definir al sufrimiento a lo largo de una tesis doctoral filosófico-mística, pero, ¿Por qué no resumimos y decimos que es "algo malo"? Por ahora tenemos dos cosas claras, que sufrimiento y gozo se complementan y que por tanto el uno sin el otro no existe. Yo empeze hablando del Buda... ¡Ah! Si... ya recuerdo. Gotama dedujo que el sufrimiento procede del deseo truncado, del no-disfrute, y aquel buen hombre propone que para evitar todo sufrimiento ¡Bien simple! no debemos desear y no nos llevaremos el chasco. Amén de lo sufrido que debe ser el camino hacia el no desear creo que el maestro místico se tropieza con un pedrusco nada más empezar a andar... Si no sufrimos, tampoco gozamos. ¿De qué sirve una vida de únicamente satisfacción si no sabes lo que eso es? Creo que el anhelar el tacto de una rosa no se ve frenado por el recuerdo de su espina clavada en la carne... su olor, su suave textura, su potente y pasional color, te dan ánimo de superar mil espinas solo por el resultado. Porque si no sabes lo que es un mal trago nunca disfrutaras uno bueno. Porque si nunca te has metido el ostión no disfrutaras del placer de, orgulloso, levantarte de nuevo y volver a dar la cara. Porque si no tienes miedo de morir nunca tendrás alegría de vivir.

Villalobos

3 Comments:

Anonymous Anónimo said...

En realidad Buda nos enseñó que el motivo del sufrimiento está en el deseo en sí.

Desde luego es un gran consejo por parte de Buda pero a ver quién es el guapo que lo consigue.

11:47 p. m.

 
Anonymous Anónimo said...

Mírale el Villalobos como discurre discurriendo. ¿Sabes qué decían en una de letra de Heroes del Silencio? Decían "el dolor es un ensayo de la muerte". pues lo último que queremos es morir. Si quemarnos la mano con un mechero, respirar humo de coche, o que la mujer de nuestra vida nos diga que nos odia que somos adoptados y nuestros padres biológicos no nos quieren nos diera gustirrinin, ya me dirá cualquiera a donde ívamos a parar. Si es que el mundo está hecho bien. lo que te hace sufrir a la larga produce la muerte (fijate qué curioso). Y lo que dá gustito normalmente favorece la vida. Imaginaos que hechar un polvo nos diera asco. SE ACABABA LA ESPECIE.

PERO: como lo que da gustito suele favorecer la vida y punto, lo malo (imagino yo) es querer aquello que no se necesita. Al final es gasto de recursos y de energía innecesario. Como la energía y los recursos son imprescindibles pa que un bicho siga vivo, ya no hace falta pensar mucho(tener un superbuga que no necesitas, un palacio, etc). PA QUÉ QUIERO YO TODO ESO. SI ESQUE ESTE MUNDO DE CONSUMO NOS ESTA ETRESAAAAANDOO.

5:24 p. m.

 
Anonymous Anónimo said...

Super color scheme, I like it! Good job. Go on.
»

2:30 p. m.

 

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